viernes, 25 de octubre de 2013

La cuestión del factor Rh




theodora.com

El problema se da cuando el factor de la madre es Rh NEGATIVO y el del bebé Rh POSITIVO. 


Todas las personas tienen un grupo sanguineo ( O, A, B ó AB ) y un factor Rh (positivo " + " o negativo " - "), que aportan  las características de la sangre de esa persona y son heredadas de los padres mediante una combinación de las de ambos.

bebesymas.com

La isoinmunización por Rh, es una enfermedad autoinmune, rara, que se origina en el periodo perinatal caracterizada por una anemia hemolítica en el feto (disminución de los hematíes o glóbulos rojos circulantes por destrucción prematura de los hematíes), debida a una incompatibilidad entre las sangres de la madre y su feto. 

El factor Rh es una proteína que se encuentra en la superficie de los hematíes y que se transmite genéticamente; las siglas Rh provienen del nombre del Macaco Rhesus, que es el mono que se empleó en estas investigaciones.

La mayoría de las personas producen el factor Rh y su sangre se considera Rh positiva. Si el factor Rh está ausente se dice que el individuo es Rh negativo.

En una mujer Rh negativa que se queda embarazada por primera vez y su feto es Rh positivo porque ha heredado el factor del padre, pueden pasar células del feto a la madre lo que sucede de forma habitual durante el parto; y si la cantidad de dichas células es suficiente, se originará una sensibilización frente al factor Rh positivo del feto, con producción de anticuerpos contra el mismo.

La madre normalmente no está sensibilizada en el primer embarazo. En cualquier embarazo posterior con feto Rh positivo, los anticuerpos maternos ya formados tienen la capacidad de destruir los hematíes (los glóbulos rojos) dela sangre del feto. A estos efectos se considera primer embarazo cualquiera anterior aunque no haya llegado a término.
Esto significa que, por lo general, la incompatibilidad Rh no es un problema cuando se trata de un primer embarazo ya que, a menos que haya algún tipo de anormalidad, la sangre del feto no entra en el sistema circulatorio de la madre durante el embarazo.
Sin embargo, durante el parto, la sangre de la madre y la del bebé pueden entremezclarse. Si esto sucede, el cuerpo de la madre reconoce la proteína Rh como una sustancia extraña y comienza a producir anticuerpos (moléculas proteicas en el sistema inmunológico que reconocen, y luego destruyen, las sustancias extrañas) para atacar a las proteínas Rh que entran en su sangre.

Esta enfermedad se relaciona principalmente con el antígeno D del grupo Rh,en muy raras ocasiones la enfermedad hemolítica puede deberse a los antígenos C, E o a otros antígenos eritrocitarios.

monografias.com
Es fundamental recordar que la primera sensibilización puede ocurrir no sólo por un embarazo, sino por un aborto, embarazo ectópico (desarrollo del huevo fuera de la cavidad uterina), amniocentesis (procedimiento obstétrico mediante el cual se extrae una pequeña cantidad de liquido amniótico para su posterior análisis), una caida, etc.

La gravedad aumenta con los embarazos siguientes y cada uno de los bebés posteriores tiene mas probabilidades de estar afectado. 

Las primeras observaciones de esta enfermedad fueron hechas durante un parto gemelar, en 1609 por una comadrona francesa, pero la primera descripción de la enfermedad hemolítica del recién nacido se debe a Landsteiner y Weiner quienes en 1940 describieron el factor Rh.

Aunque sigue siendo la incompatibilidad más común entre parejas, la incidencia de esta enfermedad ha disminuido desde 1968, debido a la introducción de la Inmunoglobulina hiper inmune. Se estima una incidencia de 6 casos por cada 100.000 nacidos vivos, aunque debido a las medidas preventivas la incidencia es cada vez más baja, siendo la enfermedad hemolítica originada por el antígeno D unas tres veces más frecuente en los individuos de raza blanca.

La intensidad de la anemia en el bebé estará determinada por la magnitud de la destrucción de los hematíes y la capacidad de reposición de los mismos. Si la anemia es intensa, como mecanismo compensador, se producen una gran cantidad de glóbulos rojos inmaduros y por tanto con capacidad transportadora de oxigeno muy insuficiente. Las manifestaciones clínicas varían en función de la severidad de la anemia y van desde los casos más leves, meramente asintomáticos o con ligera palidez y coloración amarillenta de piel y mucosas que duran sólo unos días, hasta los casos más severos con palidez intensa y hepato-esplenomegalia (hígado y bazo anormalmente grandes) secundarias. Se produce ictericia (coloración amarilla anormal de la piel) que excede las primeras 72 horas debido a que el hígado del recién nacido no puede metabolizar el exceso de bilirrubina (pigmento de la bilis) liberada por la destrucción de los hematíes.

Las manifestaciones clínicas más graves de la enfermedad dejada a su evolución son 

  • edema (acumulación excesiva de líquido seroalbuminoso en el tejido celular) o anasarca (hinchazón generalizada del cuerpo y de los miembros) masiva
  • hipoplasia (desarrollo incompleto o defectuoso) pulmonar
  • colapso circulatorio 
  • muerte neonatal. 

Entre las manifestaciones clínicas más severas, afortunadamente casi excepcionales hoy en día, se encuentran

  • el Kernicterus (cuadro neurológico grave, debido a una encefalopatía bilirrubínica, que se manifiesta con ictericia severa, mal estado general, succión débil, rigidez muscular, parálisis y retraso mental) 
  • el hídrops fetal, antiguamente llamado hidropesía fetal, que consiste en la aparición de edema generalizado del feto por afectación hepática severa,que se manifiesta como edemas, ascitis (acumulación de líquido en la cavidad peritoneal), derrame pleural e insuficiencia cardiaca. Este cuadro clínico provoca aproximadamente en la mitad de los casos la muerte intrauterina o poco después del nacimiento. 


Diagnóstico de la enfermedad 

Intraútero

Se basa en la determinación del factor Rh, a principios del embarazo, siendo preciso realizar el test de Coombs indirecto en las mujeres Rh negativas, ya que permite averiguar si estas madres ya poseen anticuerpos anti-Rh; la titulación periódica de este test a lo largo de todo el embarazo, permite observar el nivel de anticuerpos existentes

La amniocentesis para la valoración de la cantidad de bilirrubina existente se realizará en los casos en que los títulos del test de Coombs indirecto aumenten a lo largo del embarazo, o cuando la ecografía demuestre aparición de ascitis o hepatoesplenomegalia.

En casos especiales, la cordocentesis, que permite obtener sangre directamente del cordón umbilical, es necesaria para evaluar el grado de anemia fetal.


El seguimiento del feto debe hacerse mediante ecografía, que permite valorar el estado de bienestar fetal. Si el cuadro es leve se intentará respetar la evolución normal del embarazo y en caso de compromiso fetal, se valorará la posibilidad de adelantar el parto por vía vaginal o de hacer una cesárea.

Los casos más severos, siempre que se diagnostiquen dentro de los plazos permitidos por la legislación vigente, pueden ser susceptibles de una interrupción del embarazo.

En el neonato

El diagnóstico se confirma mediante la práctica de un test de Coombs directo, que pone de manifiesto la existencia de los citados anticuerpos.

El niño con enfermedad hemolítica debe ser seguido periódicamente. Se deben hacer determinaciones frecuentes de hemoglobina, hematocrito y bilirrubina sérica tras el nacimiento e incluso una vez resuelta la enfermedad, pues puede presentar complicaciones como anemia tardía y colestasis (supresión o detención del flujo de bilis) y, si han precisado exanguinotransfusión (sustitución de la sangre mediante diálisis) durante el periodo neonatal, también puede aparecer trombosis (formación de coágulos en las arterias y las venas) de la vena porta.

En términos generales el pronóstico suele ser mejor si la anemia y el hídrops fetal han sido resueltos antes del parto.

Tratamiento

El tratamiento de la enfermedad debe basarse fundamentalmente en los aspectos preventivos.

La prevención es fundamental, ya que prácticamente puede evitarse la enfermedad tratando a las mujeres Rh negativas, que aún no han desarrollado anticuerpos frente al factor Rh positivo. Para ello se utiliza la gammaglobulina anti D o inmunoglobulina Rh (Ig Rh), que es un producto biológico que bloquea la capacidad antigénica y hace que no se creen los anticuerpos frente a los glóbulos rojos fetales Rh positivos. Se recomienda una inyección de gammaglobulina anti D a la 28 semana del embarazo y otra dentro de las 72 horas después del parto. El tratamiento con esta inmunoglobulina debe repetirse con cada embarazo, dado que la protección solo dura cerca de 12 semanas. También se debe aplicar después de abortos y de realizar amniocentesis.

mamasybebes.com
El tratamiento preventivo no cura la enfermedad una vez que se ha presentado.

Desde el punto de vista terapéutico, lo más efectivo es tratar al paciente intraútero, por lo que están indicadas las transfusiones intrauterinas mediante cordocentesis (técnica que consiste en la punción con control ecográfico del cordón umbilical del feto) en los casos de fetos con inmadurez pulmonar, hidrops o anemia fetal, siendo en ocasiones necesario repetirlas cada 2 o 3 semanas hasta aproximadamente la semana 35 del embarazo.

En el neonato, si existe anemia, deben realizarse transfusiones de sangre,cuya periodicidad dependerá de la severidad de cada caso y puede estar indicada la exanguinotransfusion si existen signos de anemia hemolítica grave.

viernes, 18 de octubre de 2013

¿Se pueden prevenir las estrías en el embarazo?

pequebebes.com

La piel tiene una gran capacidad para distenderse, puede estirarse hasta diez veces durante el embarazo.

Las estrías se producen cuando las fibras elásticas de la dermis se rompen dejando una cicatriz en forma de líneas sinuosas de color blanquecino o amoratadas.

bebesymas.com
Aparecen ante el aumento o la pérdida repentina de peso, por un aumento de la producción de estrógenos en la pubertad o en el embarazo, o por enfermedades que afecten la formación normal de colágeno. Cada tipo de piel es diferente y el factor hereditario es igualmente un condicionante de su aparición.

Durante la gestación, el organismo de la mujer experimenta grandes cambios fisiológicos y hormonales que afectan a casi todas las partes de su cuerpo, también a su piel. A partir del segundo trimestre pueden aparecer cicatrices en la superficie de la piel, para evitarlo hay que intentar prevenir las estrías en el embarazo desde el primer momento.

El aumento del volumen de la barriga, sumado a que la piel se vuelve más reseca durante el embarazo, hace que hacia la segunda mitad del embarazo, y especialmente en el tercer trimestre que la tripa aumenta su tamaño rápidamente, aparezcan las estrías.

Según un estudio, nueve de cada 10 mujeres presentan estrías entre la semana 22 y 32 de gestación, y los sitios más frecuentes de aparición son el abdomen (60%), muslos (25%), caderas (20%) y mamas (10%).

PREVENIR LAS ESTRÍAS EN EL EMBARAZO 

Hay algunas recomendaciones básicas que debéis seguir desde el comienzo de la gestación y hasta unos meses después del parto, un período que muchas mujeres pasan por alto.

Control de peso en el embarazo

Un excesivo aumento de peso en el embarazo  (aumentar más de 15 kilos), además de ser perjudicial para la salud de la madre y la del bebé, es un factor de riesgo para que la piel se distienda demasiado y se produzca la rotura de las fibras de la dermis.

Un aumento de peso repentino, y la pérdida de peso después del parto propicia la aparición de estrías, lesiones irreparables en la piel.

Mantener la piel hidratada

Para mantener la piel hidratada es importante beber muchas agua, aumentar el consumo de alimentos ricos en vitaminas y nutrientes, así como aplicar cremas anti estrías desde el primer trimestre de gestación.
Al beber agua hidratamos la piel desde el interior y favorecemos su elasticidad. Además, beber agua es esencial para el buen funcionamiento de nuestro organismo.

Hay que tener la piel bien hidratada durante todo el embarazo por lo que es fundamental aplicar una crema hidratante dos veces al día para que conserve su elasticidad natural y esté preparada para resistir la distensión producida por el aumento de volumen corporal en el embarazo.

Alimentación para prevenir las estrías

No se suele pensar en los alimentos, pero pueden ser grandes aliados en la prevención de las estrías.

Especialmente los alimentos ricos en vitaminas A (productos lácteos, zanahorias, albaricoques, nísperos), vitamina E (aceites vegetales, cereales, verduras) , vitamina C (cítricos, patatas, lechuga, tomate) y en magnesio, indispensable para la síntesis de colágeno.

Los ácidos grasos esenciales, presentes en verduras, aceites vegetales y pescado, aportan elasticidad a la piel y favorecen la producción de colágeno.

Entre las frutas, aquellas que son ricas en vitamina C, especialmente el kiwi, que favorece la regeneración del tejido conjuntivo y la cicatrización.
También es muy importante tomar proteínas (carne y pescado).

Cremas anti estrías

Las cremas antiestrías son de gran ayuda puesto que cuentan con sustancias que favorecen la formación de fibras elásticas y de colágeno y tienen activos reparadores.

Necesitamos una crema que hidrate, revitalice y restaure la piel.

Entre los componentes de las cremas, tenemos que buscar las que contengan centella asiática (que actúa como bioestimulante), aceites de yoyoba y borraja, vitamina E y aceite (rosa) de mosqueta (de efectos reparadores) que ayudan a que la piel sea mas elástica.

El aceite de rosa mosqueta contiene altos niveles de ácidos grasos esenciales poliinsaturados (linoleico, oleico y linolénico) con un importante poder para regenerar los tejidos de la piel.

Hay que aplicar la crema dos veces por día, por la mañana y por la noche, para que la piel se mantenga hidratada y protegida durante todo el día. Se aplican con masajes circulares que estimulan la circulación cutánea y favorecen la penetración de los principios activos.

Sigue usando la crema anti estrías dos o tres meses después del parto, hasta que la piel vuelva a su estado natural. A veces, las estrías aparecen después de tener al bebé.


Si quieres saber más sobre cremas anti estrías podeis leer el siguiente artículo: 10 cremas para prevenir las estrias que deberias probar

Hacer ejercicio regularmente

Mantenerse en forma durante el embarazo es muy importante para estar bien y, además, un buen tono muscular evita las micro roturas de la piel así que, ¡a trabajar!

Evitar la exposición al sol

En caso de hacerlo, usa siempre un buen protector solar y, después, una loción “after sun” muy hidratante.

Masajear la piel

Los masajes circulares en las zonas conflictivas (pecho, caderas, tripa y muslos) al aplicar la crema anti estrías estimulan la circulación. Para fortalecer la piel también puedes darte suaves pellizquitos.

Utilizar un sujetador que se adapte al tamaño del pecho

Ayudará a la piel a enfrentarse a los grandes cambios de volumen de esta etapa.

No fumar

El tabaco está completamente contraindicado durante el embarazo porque daña al bebé pero también la piel.
Disminuye la producción de colágeno y elastina y, por lo tanto, favorece la aparición de estrías.

No utilizar tratamientos con Retinol-A

No están recomendados para embarazadas ni para mujeres que dan el pecho.

lunes, 14 de octubre de 2013

Ejercicio y Embarazo

La práctica de ejercicio durante el embarazo no solo es segura para la madre y el feto sino que está totalmente aconsejada. Las mujeres que practican alguna actividad física durante la gestación tienen menos molestias asociadas al embarazo, tales como insomnio, ardores de estómago, cansancio, náuseas, calambres, hinchazón, etc. Asimismo también presentarán menos dificultades en el parto y . recuperarán el peso previo al embarazo más rápidamente

El ejercicio puede ayudarla a lograr lo siguiente:

Sentirse mejor: En un momento en el que te preguntas si es posible que ese cuerpo tan extraño sea tuyo, el ejercicio puede aumentar tu sensación de control y el nivel de energía.
No sólo te hará sentirte mejor al liberar endorfinas (sustancias químicas que produce el cerebro), sino que te permitirá lo siguiente:

  • aliviar los dolores de espalda y mejorar tu postura al fortalecer y tonificar los músculos de la espalda, los glúteos y los muslos
  • reducir el estreñimiento al acelerar el movimiento intestinal
  • prevenir el deterioro de las articulaciones (que tienden a aflojarse durante el embarazo a causa de los cambios hormonales) al activar el líquido sinovial que actúa como lubricante
  • ayudarte a dormir mejor al aliviar el estrés y la ansiedad que te hacen estar inquieta durante la noche

Verse mejor: El ejercicio aumenta el flujo sanguíneo hacia la piel, otorgándole un aspecto más fresco y saludable.
Prepararte y preparar tu cuerpo para el nacimiento del bebé. El parto será más fácil si tus músculos son fuertes y tu corazón está en buen estado. El control de la respiración también puede ayudarte a enfrentarte el dolor. Y en el caso de un parto prolongado, la capacidad de resistencia al dolor juega un papel muy importante.
Recuperar más rápido la silueta que tenías antes del embarazo. Acumularás menos grasa durante el embarazo si continúas haciendo ejercicio (en el caso de haber hecho ejercicio antes de quedarte embarazada).

Aunque todavía se discute acerca de los beneficios adicionales que aporta el ejercicio durante el embarazo, algunos estudios han demostrado que el ejercicio puede incluso disminuir el riesgo de que una mujer sufra complicaciones, como la preeclampsia y la diabetes gestacional.

NO al ejercicio 

Hay ocasiones en las que el ejercicio físico está terminantemente prohibido durante el embarazo para proteger la salud de la madre, del bebé o de ambos, por eso es importante que consultes con tu médico antes de empezar, continuar o cambiar cualquier plan de actividad física.

El Colegio Estadounidense de Obstetras y Ginecólogos (ACOG ) ha determinado que debes tachar los ejercicios aeróbicos de tu lista si tienes cualquiera de los siguientes problemas médicos durante el embarazo:

  • enfermedades cardiacas
  • enfermedades pulmonares
  • insuficiencia cervical (cuello uterino débil) o cerclaje (sutura que se coloca en el cuello uterino para mantenerlo cerrado durante los dos primeros trimestres del embarazo)
  • embarazo múltiple (gemelos, trillizos, etc.), 
  • si corres el riesgo de tener un parto prematuro
  • sangrado persistente durante el segundo o tercer trimestre
  • placenta previa,  a partir de la semana 26
  • rotura de membranas (“la bolsa”)
  • preeclampsia (hipertensión arterial provocada por el embarazo)
  • hipertensión crónica
  • anemia severa


Pregúntale a tu médico qué clase de ejercicios están prohibidos en tu caso (si tienes cualquiera de estos problemas) y si es necesario que disminuyas la intensidad o duración de cualquier otra actividad. Es posible que aun así puedas hacer ciertos tipos de ejercicios, como algunos movimientos para fortalecer los brazos y la espalda.

PARA y avisa al médico si notas:

  • sangrado vaginal
  • mareo o sensación de desmayo
  • te falta el aire
  • dolor de cabeza
  • dolor en el pecho
  • debilidad muscular
  • dolor o hinchazón en la pantorrilla (podría indicar la presencia de un coágulo)
  • dolor en la espalda o pelvis
  • contracciones (especialmente antes de las 37 semanas de gestación)
  • reducción de los movimientos fetales (aprende a controlar los movimientos del bebé,  pero recuerda que el bebé suele estar más tranquilo cuanto más activa estés tú)
  • pérdida de líquido por la vagina
  • palpitaciones cardiacas o pulso acelerado, incluso después de descansar


Cuando vayas a practicar ejercicio ten en cuenta:

Tu embarazo no es el momento de tratar de perder peso ni de empezar a practicar ejercicios vigorosos, pero si hasta ahora todo ha ido bien y no tienes un embarazo de alto riesgo, puedes empezar un régimen de ejercicios físicos leves o moderados.

Las deportistas novatas deben empezar de forma gradual, haciendo 15 a 20 minutos de actividad, tres veces a la semana, preferentemente con un día de descanso entre las sesiones de ejercicios. No te ejercites hasta que te duela o hasta quedar completamente exhausta. Una buena regla que debes tener presente es: disminuye el ritmo si no puedes conversar con facilidad mientras haces ejercicio.
No se recomienda durante el primer trimestre iniciar ninguna actividad nueva.
Recordemos que hacer ejercicio o realizar una actividad física es practicar cualquier movimiento corporal producido por los músculos esqueléticos, con el consiguiente consumo de energía, y que se practica de manera regular.

Asegúrate de alimentarte bien y beber muchos líquidos. Durante el embarazo necesitas consumir aproximadamente 300 calorías adicionales al día, dependiendo de lo que pesabas antes de quedar embarazada.

Mantente cómoda y fresca durante la actividad. Si haces ejercicio al aire libre en días calientes y húmedos, ponte un sombrero y ropa suelta y cómoda. No olvides tu botella de agua para ir recuperando los fluidos perdidos.

¿ Qué ejercicios puedes realizar?

construyendounafamilia.com
Si estás embarazada y es la primera vez que vas a hacer ejercicio físico, considera las siguientes opciones:

  • Caminar: Es la mejor actividad para las mamás embarazadas porque es segura, fácil de practicar y te proporciona beneficios cardiovasculares, o sea, es perfecta incluso si no hacías nada de ejercicio antes del embarazo.
  • Natación: Es una excelente actividad porque permite trabajar todo el cuerpo, pero pone poquísima presión sobre las articulaciones. Además, tiene la ventaja de que en el agua flotas y te sientes ligera, lo cual alivia temporalmente la incomodidad provocada por la barriga cuando ya se te note.
  • Inscribirte en una clase de ejercicios aeróbicos de bajo impacto o ejercitarte con un DVD de ejercicios. Busca los que estén hechos específicamente para mujeres embarazadas.
  • Yoga prenatal y estiramientos (pilates): Estas dos actividades alivian la tensión y ayudan a mantener el cuerpo flexible y fuerte.


veoverde.com

Otro tipo de ejercicio 

bebesymas.com
El ciclismo se recomienda habitualmente como una actividad viable hasta el quinto o sexto mes de embarazo. Después de este tiempo el volumen de la barriga de la embarazada no ayuda demasiado al equilibrio de la mamá, y para evitar cualquier inconveniente lo mejor es buscar algo menos peligroso. Pero hasta llegar a dicho momento se pueden aprovechar los beneficios de ir en bicicleta, porque es una actividad que relaja, tonifica, distrae, evita el exceso de peso (tanto de la madre como del bebé), mejora la circulación (que tantos problemas da durante el embarazo)… siempre que lo hagamos con precaución. Si optamos por la bicicleta estática durante el embarazo, aunque nos perdemos los beneficios del aire libre, a cambio no existe el peligro de que nos desequilibremos, por lo que sería indicado también en el tercer trimestre de embarazo,
Aunque no es recomendable empezar a correr durante el embarazo, está bien hacerlo si ya practicabas jogging antes de quedar encinta.
Después de tu primer trimestre evita hacer ejercicios abdominales u otros ejercicios que se hagan acostada de espaldas, ya que éstos podrían provocar mareos y reducir el riego sanguíneo hacia el útero.
Los ejercicios con pesas y otros que exijan que estés de pie por largo rato sin moverte, también podrían reducir la cantidad de sangre que llega al útero. Para evitar que esto ocurra, mantente en movimiento cambiando frecuentemente de posición o simplemente moviendo las piernas.
Tampoco es aconsejable practicar deportes de impacto excesivo como spinning o triatlón.
Deportes de alto riesgo, como el buceo, y actividades durante las cuales te puedes caer y lastimar, como montar a caballo, esquiar cuesta abajo, hacer snowboarding, y practicar esquí acuático, no son aconsejables durante el embarazo.

Otros datos de interés sobre el ejercicio durante el embarazo:
http://www.muyinteresante.es/salud/articulo/el-ejercicio-durante-el-embarazo-reduce-el-parto-por-cesarea-801371554780

http://www.abc.es/sociedad/20130504/abci-embarazadas-ejercicio-corazon-bebe-201305031921.html


viernes, 4 de octubre de 2013

¿Qué es un prolapso de cordón?




El cordón umbilical es una estructura en forma de tubo, flexible, que durante el embarazo conecta al feto con la placenta. El cordón umbilical es el nexo del bebé con la madre. Este transporta nutrientes al bebé y además retira los productos de desecho del bebé. Está compuesto de tres vasos sanguíneos – dos arterias y una vena.
Las complicaciones del cordón umbilical en el embarazo son múltiples, y van desde nudos falsos, que no tienen significado clínico, hasta la vasa previa, que a menudo conduce a la muerte fetal.
Como la ecografía prenatal se vuelve cada vez más sofisticadas, muchas de estas complicaciones están siendo diagnosticados en el útero. Sin embargo, muchas no son evidentes antes del parto y la única indicación está relacionada con su asociación con ciertas patologías, tales como gemelos monocoriónicos y desprendimiento placentario.
Las anormalidades y trastornos más frecuentes que afectan al cordón umbilical antes del nacimiento y que pueden causar desafíos para la vida del feto y de su madre incluyen:

  • Circular del cordón: el cordón se enrolla alrededor de una parte el feto, habitualmente el cuello.
  • Arteria umbilical única: es la ausencia de una de las dos arterias umbilicales.
  • Prolapso de cordón: salida del cordón por el canal del parto antes del feto.
  • Nudo de cordón umbilical: se presentan en menos del 1.5% de los embarazos.
  • Inserción velamentosa de cordón: los vasos del cordón se separan antes de llegar a la placenta.
  • Vasa previa: cuando de una inserción velamentosa, algún vaso pasa por el orificio cervical antes que el feto.


PROCUBITO Y PROLAPSO DE CORDON
Se define como procubito o presentacion de cordon umbilical cuando este se encuentra por delante de la presentacion fetal con la bolsa o membranas amnioticas integras. En cambio, se habla de prolapso de cordón cuando este se encuentra por delante de la presentación fetal con las membranas rotas.

childbirthinternational.com

El prolapso del cordón umbilical se presenta cuando el cordón sale antes que el bebé por el canal del parto, lo que causa una compresión del cordón umbilical por parte de la presentacion fetal (normalmente la cabeza, aunque tambien pueden ser las nalgas) que limita el aporte de sangre y oxígeno del mismo. Esto puede poner en peligro la vida del bebé, ya que provoca una disminución en su frecuencia cardiaca. Se puede normalizar a través del suministro de oxígeno y fluidos, pero suele ser necesario acelerar el parto de forma natural o a traves de ventosa o forceps si el parto es inminente o practicar una cesárea.

CAUSAS Y FACTORES DE RIESGO
La causa más común de prolapso de cordón umbilical es la ruptura prematura de las membranas (“la bolsa”) que contienen el líquido amniótico. Otras causas comunes incluyen:

  • Parto prematuro
  • Partos múltiples  - El segundo bebé en nacer es el que tiene mayor riego 
  • Cantidades excesivas de líquido amniótico (polihidramnios)
  • Parto de nalgas
  • Multiparidad
  • Cordón umbilical anormalmente largo
  • Placenta de insercion baja
  • Yatrogenia - Ruptura artificial de las membranas durante la inducción o aceleración del parto fundamentalmente cuando se practica con presentaciones demasiado altas o en presentaciones anómalas no diagnosticadas.


FISIOPATOLOGÍA
Las alteraciones fetales dependerán del grado de compresión y si existen o no  contracciones uterinas.
Así como en el procúbito generalmente no se adapta de forma firme la presentación al canal del parto y el compromiso de la circulación umbilical no es muy acusado, al producirse la rotura de la bolsa (amniorrexis) la presentación se ve impulsada al canal del parto, atrapándose el cordón entre éste y el feto, de tal forma que dificulta o anula la circulación umbilical con las graves repercusiones hipóxicas (falta de oxigenación) que esto supone.
Las presentaciones cefálicas son las de mayor riesgo, puesto que la compresión tiende a ser más intensa.
Aparecen alteraciones en los latidos cardiacos fetales, que indican una insuficente
oxigenación. Habitualmente se produce un sufrimiento fetal agudo que puede llevar a la
muerte intrauterina.

DIAGNÓSTICO
Visión directa del cordón en los casos en que aparece en la vulva.
Visión con espéculo del cordón en vagina.
Tacto vaginal, tocando el cordón, latiendo o no, por delante de la presentación. Más
dificil de palpar en el procúbito.
Disminución de los movimientos fetales.
En ocasiones alteración del color del líquido amniótico.
En ecografías rutinarias practicadas al final del embarazo pueden diagnosticarse
ocasionalmente procúbitos .

PRONÓSTICO
El pronóstico fetal es malo,con una mortalidad de entre el 10–20 %.

TRATAMIENTO
Es necesario establecer si el feto está vivo o muerto. Hay que recordar que el cordón
prolapsado puede no pulsar y, sin embargo, el feto puede estar vivo. Se utilizarán para la
comprobación estetoscopio, doppler o ecografía de tiempo real:
-Si el feto está muerto, salvo circunstancias excepcionales de desproporción,
situación transversa, etc, se adopta una postura expectante y se optará por la vía vaginal.
-Si el feto está vivo, previamente a la extracción del feto, se tomarán las siguientes medidas encaminadas a impulsar a la presentación hacia la parte superior del canal del parto y disminuir la presión de la presentación sobre el cordón umbilical:


  • Inhibir la dinámica uterina. 
  • Rellenando la vejiga urinaria materna con 500-700 ml de solución salina. 
  •  Colocar a la paciente en Trendelemburg, o en posición genupecoral. 
  • Rechazar manualmente la presentación fetal hacia el abdomen en un intento de aliviar la compresión funicular. 
  • Una maniobra que rara vez tiene éxito es el intento de empujar el cordón hacia el útero. La recolocación del cordón de esta manera puede ser nociva para el feto y en ningún caso se aconseja intentarla (se puede producir un espasmo de cordón con lo que se colapsan los vasos sanguineos dentro de él lo que impide el flujo sanguineo hacia el feto). 
  • Administrar oxígeno a la madre. 


Solamente si la expulsión es inminente (dilatación completa, presentación en tercer
plano) y la expulsión fetal mediante los procedimientos ordinarios (esfuerzo materno, ventosa, fórceps o espátula) es posible de una forma previsiblemente más rápida y atraumática, se utilizará la vía vaginal sino se realizará cesarea urgente.